Un colegio privado buscaba modernizar su infraestructura deportiva para ofrecer a sus estudiantes instalaciones de primer nivel. El antiguo campo presentaba grietas y desniveles que no solo limitaban el entrenamiento, sino que también aumentaban el riesgo de lesiones. Decidimos implementar un sistema de pisos deportivos de alto rendimiento, diseñados para brindar amortiguación, resistencia y una superficie uniforme adaptada a diferentes disciplinas.

El proyecto incluyó la preparación del terreno, la instalación de materiales poliméricos y acabados antideslizantes que cumplen con estándares internacionales. Tras la obra, los estudiantes pudieron entrenar en condiciones más seguras y cómodas, incrementando su rendimiento y motivación. Además, el colegio ganó prestigio al contar con un espacio deportivo moderno, lo que reforzó su propuesta educativa y atrajo a más familias interesadas en la formación integral de sus hijos.